¿Te estás planteando viajar a Nueva York con un bebé? Te explico mis consejos a raíz de haber viajado con el mío. Ya te aviso que es todo un reto, aunque me imagino que cada bebé (y padres) es un mundo.
Lo voy a encarar a través de consejos prácticos que he ido viendo y con las dificultades que nos fuimos encontrando. Viajar a Nueva York siempre es un reto, así que con un bebé todavía más.
Preparativos para viajar a Nueva York con un bebé
Hay ciertos aspectos que has de tener en cuenta para viajar a Nueva York con un bebé y tener preparados a nivel de documentación:
- Tu hijo necesitará un pasaporte en vigor. Para sacar su primer pasaporte debéis ir los dos progenitores a hacérselo, no puede ir solo el padre o la madre. Tenéis que estar los dos presentes.
- El bebé también necesitará un ESTA, por pequeño que sea el niño o la niña.
- Tener claro lo que no se puede llevar a Nueva York (o Estados Unidos en general), y qué no puedes llevar en el equipaje de mano. Por ejemplo, la leche de fórmula solo puedes llevar unos 300 gramos en el equipaje de mano.
- Es muy aconsejable tener un seguro de viaje para Nueva York de cancelación (los niños es fácil que se pongan enfermos y quizás tengas que cancelar el viaje) y un seguro médico para asistencia en Estados Unidos. El seguro que yo compré para viajar a Nueva York con mi bebé (después de mirar muchas opciones) fue el de IMA Asistencia contratado en Mondo.
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La temida maleta
A la hora de hacer la maleta, procura poner pañales y toallitas para un par de días. Los pañales ocupan muchísimo y es un espacio en la maleta que no vale la pena malgastar en esto, ya que en Nueva York podrás comprar pañales sin problema. En Duane Reade podrás comprarlos (una de las marcas más populares es Pampers) además de toallitas. Localiza uno cerca de tu hotel y el primer día compra lo que necesites para todo tu viaje.
En nuestro caso también nos llevamos una minibotellita rellenada con Fairy para poder limpiar los biberones por la noche en el hotel. De hecho, esta botellita la llevábamos con nosotros por si durante el día también teníamos que lavarlos. Tengo que decir que también le doy el pecho, así que el bibe no era tan primordial en nuestro caso.
En cuanto a otros extras, pues algún juguete, colores y no te líes a llevar todos los «por si acaso». Estás en Nueva York, y aunque es como una jungla, hay tiendas en todas las calles.
Volar a Nueva York con un bebé: lo primero es su seguridad
Vamos a ir por partes, porque para mi fue de los aspectos más complicados. Hay que tener en consideración que no es lo mismo un bebé de menos de 6 meses que bebés más mayores.
Todos sabemos que las compañías ofrecen el vuelo gratis para menores de 24 meses. En algunos casos, depende de la compañía, te ofrecen una sillita o cunita especial para los bebés. Llama a tu compañía (mejor antes de reservar los vuelos) para ver qué condiciones tienen con los bebés.
En mi experiencia, cuando viajé a Nueva York con mi bebé, lo hice con Norwegian. La experiencia no fue muy buena con la compañía, ya que había mucha desinformación sobre el tema. Con cada persona que hablaba me informaban diferente. El caso es que mi bebé ya era grandecito, tenía 20 meses, por lo que decidí comprar billete para él. En algunas comunicaciones me decían que sí tenían sillita de seguridad para él y en otras llamadas me decían que no, pero que podía llevar la mía. Como mi hijo era ya muy mayor para una sillita tipo huevo, vi inviable llevar mi silla de seguridad del coche. Así que decidí que con el cinturón de seguridad sería suficiente. Esto no significa que sea suficiente, significa que nosotros tomamos esa decisión.
Bebés menores de 8 meses o que no se mantienen sentados
¿Por qué hago esta distinción? Porque para los bebés más pequeños tienes la opción de pedir una cunita para el viaje. Esto, obviamente, dependerá de la compañía aérea y deberás llamar antes de comprar los billetes para saber si tienen esta cunita especial. Si no fuera así, los menores de 8 meses, caben en una sillita tipo maxi-cosi. La sillita maxi-cosi te irá genial para el vuelo, pues la puedes instalar en uno de los asientos. En este caso deberás comprar billete, a menos que quieras que el bebé vaya encima tuyo todo el viaje.
En este punto quiero hacer un inciso: las sillitas tipo huevo o maxi-cosi son solo apropiadas como sillitas de seguridad. Nunca como silla de paseo. En este artículo del blog El Laboratorio de Mamá explica muy bien las razones. Por este motivo, si vas a viajar a Nueva York con un bebé que aún no se sienta deberás llevar también entre tus bultos el capazo o tener un cochecito que la espalda le quede totalmente recta.
De modo que, el maxi-cosi, huevo o los Grupo 0 o Grupo 0+ son solo para el traslado en el avión y para el traslado en taxi o si decidís contratar traslado del aeropuerto a Nueva York.
Bebés mayores de 8 meses y que se mantienen sentados
En este caso, lo que toca es que lleves la sillita de seguridad de tu bebé porque las cunitas son un poco pequeñas para bebés tan mayores. Toca seguro comprar un billete de avión para el bebé. Sobre todo cuanto más mayor sea, porque no aguantará encima tuyo o de tu pareja todo el viaje. Piensa que de media un vuelo directo desde España es de 7-8 horas. Para su seguridad en el avión te darán un cinturón de seguridad que se ata al de un adulto, además de un chaleco salvavidas de talla mini.
Lo ideal es que el cinturón de seguridad esté todo el vuelo atado a ti. Cualquier cambio de presión puede hacer que el bebé salga disparado hacia el techo. Si has comprado un asiento para él, yo lo que hice fue atar el cinturón del bebé a su asiento. Durante la noche, la hora de dormir, la pasó así, y se pudo estirar perfectamente en su asiento y dormir durante casi todo el viaje. La azafata del vuelo me dio su aprobación (hubiera sido muy complicado todo el vuelo con el niño encima nuestro).
En cualquiera de los casos, por mi experiencia, te recomendaría que comprarais los vuelos para volar de noche. Así el vuelo será mucho menos traumático para todos. Además, al llegar a Nueva York aún quedarán horas de sueño para todos. En nuestro viaje con nuestro bebé, llegamos a las 9pm (hora de Nueva York), que para nosotros eran las 2am. Aunque como padres estés un poco destrozado, tu bebé seguramente aún dormirá bastantes horas más (bueno, dependerá de a qué hora se suela despertar normalmente, claro).
Mi bebé llora en el avión
Es habitual que a los bebés les duelan los oídos con la presión alta. A esto se le llama otalgia (dolor en el oído) y tinnitus (zumbido en el oído). Puede pasarle tanto al despegar como estando ya en el aire. Lo que pasará es que se pondrá a llorar como un desconsolado. Lo primero, mantén la calma, porque algunos viajeros no lo entienden. El dolor de oído se les suele pasar con la deglución, por lo que tienes que darle el pecho o un biberón.
Traslados en Nueva York con un bebé
A pesar de viajar cada año a Nueva York te voy a confesar por qué no lo hice siendo mi hijo más pequeño: por todo el trajín de la sillita de seguridad que te he contado antes. Necesitas una sillita de seguridad o maxi-cosi cuando son muy pequeñitos. En nuestro caso teníamos una sillita que nos dejaron unos amigos hasta que el niño tuvo 6 meses. Luego tuvimos que comprar una sillita evolutiva, la mejor del mercado, y aunque tiene hasta ruedas para llevarla como una trolley, era un trasto más que no queríamos llevar. Así que decidimos esperar a que el niño fuera más mayorcito.
Como conocemos Nueva York, sabemos lo siguiente:
- es un vuelo de bastantes horas (8 horas) más el control de seguridad, que luego explicaré.
- íbamos a llegar de madrugada para nosotros (2 de la madrugada para nosotros, 9 de la noche hora de Nueva York).
- los bultos que llevábamos: maletas, bolso/mochila, cochecito, bolso del niño y el niño, claro.
Decidimos que lo más idóneo era contratar un traslado del aeropuerto al hotel en Manhattan y evitar el metro. Viajar a Nueva York con un bebé no es fácil de inicio, porque cuando buscas información en internet te encuentras datos contradictorios. Por un lado vi que no es obligatorio en los taxis llevar sillita de seguridad, pero muchos taxistas se niegan a llevarte si no la tienes. Otros sí te aceptan al bebé, pero tenías que llevar al niño oculto estirado en el asiento. Y lo peor de todo, el niño no va seguro. Ya sabes los problemas que puede conllevar un frenazo a solo 50km/h, así que teniendo en cuenta que la conducción en EE.UU. es de locos, era inviable llevar al bebé sin una sillita de seguridad.
Encontramos Kidmoto, que es un servicio de traslados del aeropuerto a Manhattan con sillitas de seguridad para bebés y niños. No tienen las mejores sillitas de seguridad (vamos, no usan las Kipplan, aunque algo es algo), aunque el bebé, por suerte, pudo ir a contramarcha.
Hotel en Nueva York con un bebé: nuestra experiencia
Buscamos un hotel en Nueva York, lo que hicimos fue buscar hoteles en Booking con cuna (crib en inglés). Y lo cierto es que encontramos uno que estaba bien. Escribí un par de mensajes a través de Booking preguntando para asegurarnos tener la cuna cuando llegáramos (llegaríamos al hotel que para nosotros serían las 4 de la madrugada) e incluso llamé por teléfono a Nueva York para asegurarme. Me confirmaron que no habría problema.
No fue así.
Aún estamos esperando la cuna después de reclamarla una vez allí durante 3 días seguidos. Así que en este punto no te puedo recomendar el hotel Radisson de Wall Street (y por extensión, ningún Radisson). Solemos hacer colecho en casa, así que no hubo mucho problema en esto (aunque se cayó de la cama 2 veces y eso me enfada aún más por la mala experiencia que tuve con el hotel).
Lo ideal es que tengas un plan B. Que haya en la habitación una tercera cama para poder poner allí el bebé a dormir y con cojines y almohadas para que no se caiga, o bien que compres una barandilla para cama (cuesta unos 20€) y la instales en la cama. Esto en caso que realmente no tengan cunas o no te la instalen como nos pasó a nosotros. La puedes comprar por Amazon.com y que te llegue al hotel.
En algunos hoteles te cobran por el alquiler de la cuna un suplemento diario.
Alquilar apartamento
No te puedes alquilar un apartamento de Airbnb en Nueva York, a menos que vayas a viajar más de un mes o estés compartiendo el apartamento. Ahora mismo alquilar apartamentos menos de 30 días es ilegal y ni siquiera la plataforma te permite seleccionar las fechas.
En cambio, te aconsejo que te mires los apartamentos Sonder. Cuando yo viajé con mi bebé aún no existían. Pero al año pasado estuve en el Sonder Court Square y fue una maravilla. Puedes alquilar una habitación suite que en su cama gigante cabréis todos cómodamente y tenéis espacio de sobra en la habitación.
Comer con un bebé en Nueva York
En este sentido no podemos dar muchos consejos. El niño ya era mayorcito y comía casi de todo. Intentábamos que fuera lo más variado posible aunque no podíamos dejar de caer en la tentación de comer comida típica de Nueva York aunque no fuera muy saludable. Como he dicho al principio, cada niño es un caso a parte. En nuestra familia siempre hemos hecho baby led weaning, así que le dábamos de comer de todo y él gestionaba lo que comía. También es cierto que al tener más de 1 año, ya tenía todos los alimentos introducidos.
La mayoría de los lugares para comer son baby-friendly y tienen tronas y además suelen ser muy amables con los niños (no te olvides dejar una buena propina). Casi siempre encontrarás un menú infantil, aunque por desgracia, los menús infantiles suelen ser menos saludables que la mayoría de platos (lo mismo pasa en nuestro país).
Vimos que mucha gente usaba estos manteles individuales deshechables, pero a nosotros no nos convencen mucho porque generas residuos plásticos que para nosotros son innecesarios. Pero reconozco que son prácticos.
En cuanto al uso de los baberos, intentábamos que un babero nos durara un día entero, así que no tuvimos que llevar muchos ni tirar de servicio de lavandería en el hotel.
En cuanto a la comida saludable: no te preocupes, porque hay más restaurantes y lugares para comer que en cualquier otro lugar del mundo. La mayoría de restaurantes tienen página web donde cuelgan los platos y menús (con sus precios).
Si tu hijo comiera papillas o potitos, en los restaurantes te los calentarán sin problema. Y podrás comprar los potitos en parafarmacias como Duane Reade, que están por todo Manhattan.
Si necesitas comprar fruta para las meriendas y picoteos, podrás hacerlo en la inmensidad de grocerys, convenience stores, bodegas y supermercados que hay en Nueva York. Viajar a Nueva York con un bebé hará que desarrolles un sexto sentido para localizar estos locales. No te apures, hay muchísimos. Algunos de los supermercados más famosos son Whole Foods y Trader Joe’s.
Paseos y desplazamientos por Nueva York con un bebé
Vamos a ser claros. Las calles están llenas de trampas mortales para los cochecitos: calles mal asfaltadas, charcos grandes, obras que te impiden el paso, basura… (cosa que las autoridades quieren erradicar). Esto hace que si tu hijo quiere caminar (si ya camina) por las aceras de Nueva York sea algo imposible. A todo esto, su interés siempre estará en todo lo que está a su alcance. Es decir, la basura.
Tendrás que intentar evitar como puedas que el niño camine, y hacerlo solamente en lugares más abiertos como parques.
Otra cosa que te irá muy bien es la mochila de porteo. En nuestro caso tenemos una Fidella, la nuestra sirve hasta los 30 kilos, es ergonómica, respeta la forma de la espalda del bebé y la puedes llevar a la espalda cuando el niño sea más mayor. Recuerda que hay muchas marcas que no son ergonómicas. Evita a toda costa aquellas en las que el bebé va de frente a la calle. Hemos usado también la Marsupi, que va muy bien cuando son pequeñitos. Y es muy práctica porque no tienes que ir ajustando los arneses.
Moverte por Nueva York con un bebé
En cuanto a los desplazamientos por la ciudad, mi recomendación es que hagas todo lo que puedas a pie. Seguramente no podrás evitar usar el metro de Nueva York, pero intenta detectar las estaciones de metro que tienen ascensor.
Esto no es tarea fácil, porque hay menos de las que debiera. Además, hay transbordos en los que no encontrarás ascensor. Así que algo que te aconsejo: intenta llevar los menos bultos posibles, porque al subir y bajar escaleras con el cochecito deberás sumar el peso de las compras y demás cosas que lleves del bebé.
También intenta evitar las horas punta.
Para acceder y salir de la estación de metro, tendrás que hacerlo por las puertas de emergencia, que normalmente están al lado de los tornos por donde se pasa la MetroCard de Nueva York o ahora la OMNY. Si es una estación adaptada podrás pasar la MetroCard por la puerta para personas que necesitan silla de ruedas, que se abrirá automáticamente al pasar la tarjeta. Si no es así, tendrá que entrar primero uno de los padres por los tornos, abrir desde dentro la puerta de emergencia, pasar el cochecito, y luego el otro adulto pasar por el torno marcando su billete.
No pasa nada por abrir la puerta de emergencia para pasar el cochecito.
Visitas en Nueva York con un bebé
Lo primero que has de saber es que en la mayoría de lugares los niños menores de 2 años no pagan. En algunos los menores de 3 tampoco.
Como antes comentaba, todo depende de la edad del bebé y de cómo seas como padre a la hora de hacer las visitas. Te adelanto que planificar el viaje ser hará un poco difícil, porque es tu hijo quien marca realmente los tiempos.
- Observatorios – Algunos lugares, com en la visita a la Estatua de la Libertad y el Empire State Building, te harán sacar al bebé del cochecito. Tenlo en cuenta, si es de los que tiene el sueño frágil en cuanto lo sacas de su cochecito. Otros sitios como el One World Observatory, no nos lo hicieron sacar. Lo ideal es que hagas estas visitas en momentos en que el niño esté despierto. Aunque, claro, no podrás disfrutarlas igual de bien, sobre todo si se trata de lugares muy concurridos y tu bebé ya camina.
- The Vessel – En cuanto a la visita a The Vessel debo advertirte que no es un lugar apropiado para visitar con un bebé. En primer lugar no se puede entrar con el cochecito. Se ha de dejar fuera en la calle y sin vigilancia. Así que deberás turnarte para vigilarlo. O bien arriesgarte a que no te lo roben (hay más cochecitos). En segundo lugar, al ser una obra que es todo escaleras, deberás llevar a tu bebé a peso (o en la mochilita de porteo, si llevas una). En ningún caso es un lugar seguro para que tu bebé corretee por allí.
- Times Square y el Toro de Wall Street – Son lugares súper concurridos durante el día. Aprovecha el cambio horario de los primeros días de viaje para hacer estas visitas y ahorrarte el agobio de la gente con tu bebé.
- Tours guiados – Si lo que quieres es hacer la excursión Contrastes de Nueva York, deberás indicar al hacer la reserva que vas con un bebé. El bebé no paga por la visita, aunque ocupa un lugar en el minubus (en el caso del tour Contrastes VIP). Como avisarás a la hora de hacer la reserva, te preguntarán si necesitas sillita de seguridad. Sí, tienen sillita de seguridad, al menos donde yo contraté, que es en el lugar que recomiendo en mi web. Si decides hacer este tour, te aconsejo que escojas la opción Contrastes VIP porque es la que dura menos tiempo. Y ten en cuenta que quizás tu hijo no aguante muchas horas metido en un minibus. Pero como siempre digo, depende del niño.
- Tiendas y grandes almacenes – La mayoría de visitas, grandes almacenes, etc. tienen para entrar puertas giratorias bastante pesadas en las que no cabe un cochecito. No te apures, siempre habrá cerca una puerta normal, y generalmente con un doorman que te pondrá las cosas más fáciles.
- Cambio de pañales – Para el cambio de pañales, en general, podrás hacerlo en los baños públicos de todas las atracciones turísticas y museos. En algunos restaurantes puede ser que tengas el espacio más limitado.
- Lactancia – Podrás encontrar lugares, como el Museo de Historia Natural, que hasta tienen un espacio Mamava, una zona reservada y recogida para la lactancia (ideal si tu bebé se distrae con una mosca) y cambio de pañales que te enseño en la foto de aquí abajo. Es también ideal si necesitas extraer leche con el sacaleches. Para entrar necesitarás bajarte una app para que te dé el código de desbloqueo de la puerta. Pero en general en cualquier lugar podrás dar el pecho a tu hijo.
Tip: evita los días en que los museos de Nueva York son gratis. Esos días las visitas son más agobiantes.
Controles con un bebé
No solo en las visitas tendrás que superar el control de seguridad, sino también en los aeropuertos de Nueva York.
Si llegáis a Nueva York desde un vuelo directo desde España (lo recomendado al viajar con un bebé), lo normal será que lleguéis al aeropuerto JFK o el aeropuerto Newark (al aeropuerto LaGuardia llegan principalmente vuelos nacionales).
Control de inmigración en JFK
Una cosa que me indignó es que, a pesar que la compañía aérea nos aseguró que tendríamos el cochecito al desembarcar del avión, no fue así. Como llevábamos la mochila de porteo, íbamos un poco preparados. Pero aún así tuvimos suerte porque el niño se despertó (y tuvo un buen despertar) y fue caminando hasta el control de inmigración.
Una vez allí, pudimos pasar por el control de inmigración rápido porque ya habíamos estado antes en Nueva York. Este control se hace a través de unas máquinas y la cola es mucho más corta.
Si no es tu caso, tendrás que esperar en la cola que puede durar entre una y dos horas. No es broma. Así que una mochila de porteo entre tu equipaje de mano no es mala idea. A menos, claro, que hayas conseguido que te entreguen el cochecito al desembarcar del avión.
Control de seguridad en JFK
A la vuelta, tuvimos que pasar el control de seguridad de JFK, como todo el mundo. El niño tiene que salir del cochecito y pasar por el control tradicional con un adulto. Los nuevos controles de seguridad de JFK para adultos te escanean, y estos no son adecuados para los bebés.
El bebé pasará en brazos de uno de sus padres si es pequeñito. Si es más mayor y sabe caminar, pasará de la mano de uno de sus padres. Si el niño pitara, se volvería a repetir el procedimiento, ya que se intenta evitar el cacheo del bebé.
Qué puedo llevar al aeropuerto con un bebé
Para el aeropuerto, tanto en España como en Nueva York, puedes llevar leche de fórmula, leche materna extraída, zumitos y agua. En nuestro caso, el agua siempre la compramos dentro del aeropuerto porque por su edad ya no era necesario que fuera de mineralización débil. Pero si necesitaras un agua especial para sus bibis, puedes llevar unas botellitas. Es probable que de los líquidos hagan un escaneo especial. Antes de pasar el control de seguridad, mejor que saques todo esto de la maleta. Pero no hace falta que lo pongas en una bolsa transparente como los enseres de aseo.
En este artículo te dejo un montón de información sobre qué no se puede llevar a Nueva York.
Entretenimieto para el bebé
Por mucho que a ti los rascacielos de Nueva York te impresionen, o los escaparates te llamen la atención, seguramente a tu hijo no le diga nada. Para viajar a Nueva York con un bebé necesitarás algún juguete que no abulte mucho. Nosotros nos llevamos un osito de peluche y allí le compré un par de coches de los que se encaprichó en una de mis librerías de Nueva York favoritas. Si tienes en mente visitar alguna juguetería, como FAO Schwarz, aprovecha para comprarle allí algo nuevo.
Además llevamos en nuestro Dropbox algunos vídeos de canciones ya bajados y de los que no necesitábamos conexión. Igualmente también tiramos mucho de YouTube gracias a tener internet en Nueva York. Nosotros no somos muy partidarios de dar a los niños pequeños tanto audiovisual, pero es un viaje de muchos días y necesitarás que en algunos momentos se quede en su cochecito.
Una cosa que nos fue muy bien, también, fueron unos gomets. Podemos decir que dejó la pantalla de vídeo del avión empapelada (casi hasta que se durmió). Y también los usamos en otros momentos de espera. Una libreta con algunos colores tampoco va mal. En mi caso me robó varias veces mi libreta de notas.
Si tu bebé es un poco grandecito, hay dos visitas que le encantarán: Central Park y poder perseguir ardillas (recuerda que no se deben tocar) y el Museo de Historia Natural, especialmente la sección de animales. Nosotros no somos amigos de los zoos, por eso no fuimos a ninguno.
Otra buena opción es el Children’s Museum of Manhattan. Allí hay juegos para los más pequeños y mucho espacio para corretear, gatear o moverse a su aire. Y sobre todo, experimentar con todos los sentidos. Puedes ir durante todo el año, aunque si el calor aprieta o el frío es helador, es un buen lugar para estar resguardado del tiempo. Plantéatelo también si está lloviendo en la calle.
Parques para niños
Quizás tu bebé sea lo suficientemente mayor como para querer/necesitar jugar en un parque. Si buscas en Google Maps, hay muchísimos. Hay los parques, tipo Central Park que hemos comentado, o Washington Square Park donde perseguir palomas o bailar al son de un músico callejero, o el High Line Park, donde ver las plantas de cerca (ojo no se pueden tocar y puedes encontrar ratoncillos entre los matorrales). Incluso el parque donde se hace homenaje a Stonewall es una zona muy recogida para que tu bebé pueda corretear un rato, o en el Brooklyn Bridge Park podrás disfrutar de un rato de hacer la croqueta con vistas a Manhattan.
También hay parques de juegos con columpios, que son los playgrounds y hay por toda la ciudad. De nuevo, consulta Google Maps para localizar uno cerca de ti.
El jet lag y cambios en los horarios
Lo primero que quiero aclarar es que despertarte a las 5 de la mañana no es jet lag. Eso es cambio de rutina de sueño, cambio de horario. El jet lag es un malestar general en tu cuerpo que te puede provocar mareos, náuseas, cansancio exagerado, y ganas de dormir. Yo personalmente no lo he sufrido nunca, pero mi marido sí. Aquí te explico más sobre los efectos del jet lag y cómo intentar evitarlos.
No sabría decirte si un bebé puede tener jet lag. Yo creo que no, pero no está de más que estés al tanto de los posibles síntomas.
Quizás tú puedas adaptarte más o menos a los cambios de horarios. Pero tu bebé no. Si llegas a las 2am al hotel (hora de España), ten por seguro que se despertará a la hora que se suele despertar en España. Así que el primer día, quizás te encuentres que a las 4am (hora local), estáis despiertos arreglándoos para salir a desayunar.
Y así seguirá siendo hasta que llegue un día en que se habrá adaptado al nuevo horario. En nuestro caso pasaron unos 4 ó 5 días, aproximadamente.
Esto quiere decir que posiblemente estéis buscando algún lugar para cenar a las 7 de la tarde (no te preocupes, los hay a patadas) porque a las 9 de la noche ya estaréis metidos en la cama.
No pasa nada. Estás en Nueva York. Con tu bebé.
Lo ideal es planificar los primeros días con todos aquellos lugares que se pueden visitar muy temprano o son al aire libre y no dependen de un horario de entrada.
Consejo final
No es fácil viajar a Nueva York con un bebé. No tienes las comodidades de casa. Uno mismo se agobia porque a veces tienes la sensación de perder el tiempo, sobre todo considerando que no es un viaje barato. Las comidas son complicadas porque piensas que estás molestando a los demás comensales.
Pero la realidad es que todo el mundo se muere de amor cuando ven a tu bebé. Siempre le dedican una sonrisa e incluso unas palabras. Y todo el mundo comprende que se trata de un bebé, no de una máquina que se pueda desconectar.
¿Has pasado ya por la experiencia de viajar a Nueva York con un bebé? Puedes dejar tus dudas o consejos en los comentarios. Estaré encantada de ayudarte.
Hola!! Estaba buscando información para planificar el viaje, y me ha dado toda la pereza del mundo….ir a NY con el bebé.
Lo siento… no es hate
Por suerte la nuestra tiene 16 meses y ya hemos visitado 6 paises con ella! Así que no voy a buscar más info, prefiero vivir como hasta ahora mi propia experiencia, desde el desconocimiento. De esta forma no nos ha ido nada mal!
Hola!
Claro, Maria! Cada bebé es diferente, cada edad es diferente y cada familia es diferente. En este artículo he explicado mi experiencia, con errores incluidos, y mis aprendizajes. Mi hijo tenía menos de dos años. Siempre ha sido un niño muy despierto y curioso, le gusta mucho conocer las cosas por sí mismo… por eso a veces era complicado llevarlo en el cochecito. Nosotros también viajamos desde el desconocimiento. Básicamente buscamos información con el tema del transporte, porque valoramos mucho su seguridad y ya éramos viajeros habituales de Nueva York, pero sin bebé 😛
Que vaya muy bien vuestra aventura 😀
voy con mi bebe de 5 meses, voy un poco freak pero ya compre los billetes jajajaja…tus consejos son fenomenales.
Queda claro que viajar con bebes no es agradable no por el bebé si no por todo lo que tienen que pasar.
A ver como nos va!
Hola, Be!
Seguro que os va bien! Al final se trata de adaptarse al bebé. Creo que cuanto más pequeño el bebé, más fácil puede ser el viaje, porque cuanto más pequeño más duerme 😛
La clave es tomárselo con paciencia. Y, por supuesto, cada niño es un mundo. Los habrá más tranquilos y los habrá más movidos.
Ya me contarás tu experiencia 🙂
Un abrazo!
Zahara
Me ha servido mucho esta info. Un abrazo desde Chile.
Me alegro mucho, Carla! Espero que disfrutes de tu viaje a Nueva York con tu bebé. Es probable que pase solo una vez en la vida, así que espero que sea muy especial. Un abrazo!
Hola hay lugares en new york dond no dejen entrar a bebes? Crees que por la pandemia eso suceda?
Hola, Sarai!
No, no hay ningún lugar donde no dejen entrar a bebés, más que los rooftops de noche. Tampoco creo que con la pandemia cambie. Por eso no te preocupes 🙂
Un abrazo!
Zahara